En Estados Unidos mandan a chicos a la guerra de Irak para luego hacer películas sobre lo triste que es el regreso de esos chicos y las consecuencias en su vida que ya no puede ser igual, etcétera. Paul Haggis ganó dos años seguidos el oscar al mejor guión por Million Dollar Baby y Crash y ahora ha hilvanado una historia sobre la búsqueda de un padre que entega un hijo a la madre patria y luego, como no se lo devuelven, remueve Roma con Santiago para encontrarlo y lo que descubre en los ambientes militares de donde él mismo viene, le pone los pelos de punta.
Tommy Lee Jones está seco y austero, brillante. Charlize Theron -la detective de la policía que le ayuda en las pesquisas- deslumbra en su controlada belleza y sale demasiado poco Susan Sarandon. La historia de la lucha entre David y Goliat sirve de metáfora en la que se puede mirar cualquier guerra y cómo la historia se repite y nadie vuelve sano mentalmente después de lo visto y vivido, etcétera. Es una de las grandes películas del momento, habla de un tema delicado y contemporáneo, la trama se va llevando con expectación y el plano final de la bandera USA puesta del revés hace casi tanto daño como la que arrastraba el reguero de agua en Bienvenido Mr.Marshall.
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1 comentario:
hola Deme tienes razon
Beckett buscava verdad profunda e esso basta!absurdo o autro no es importante.
Importante es investigar e sentir
escibir oler las cosas del mundo dal profundo dell'alma.
Perdona se te commento aqui esto ma me gustava contestarte.
Perdona tambien l'itagnol que utilizo. un grande ciao Umbe
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