viernes, 20 de marzo de 2009

Cuatro pueblos

No hay nada como un día en el campo. Nuestra excursión se centró en cuatro pueblos del noroeste de la provincia de Guadalajara, cerca de la sierra del Ocejón, localidades con tejados de pizarra muy peculiares. En Tamajón hay una iglesia del siglo XVI con un atrio abierto y porticado y una docena de canecillos en la fachada, además de un reloj solar. En Valverde de los Arroyos, uno de los más característicos pueblos de la llamada arquitectura negra (piedras planas y oscuras), caminamos hacia la Chorrera de Despeñalagua -una espectacular cascada- através de una senda rodeados de enormes arbustos de brezo. En Hiendelaencina comimos en el Mesón Sabory un delicioso asado de cabrito, que tuvimos que rebajar con un agradable paseo hasta las antiguas minas de plata, las más importantes de España, explotadas entre 1844 y 1926, con unos años de esplendor dirigidos por una compañía inglesa que creó un complejo industrial y de edificios que aún se conserva fantasmagóricamente, constituyendo un mágico decorado de película. En Cogolludo admiramos en su Plaza Mayor el palacio renacentista de los Duques de Medinaceli, cuya fachada es obra de Lorenzo Vázquez, de finales del siglo XV, con un curioso almohadillado florentino y unos ventanales muy elegantes. Cuatro pueblos y la belleza de la sierra alrededor.

5 comentarios:

Javier dijo...

A ti desde luego la casa no se te cae encima, jejejejejejeje, que trajín te me llevas.

Belén dijo...

Tienes razón, no hay nada mejor como un día en el campo!

Besicos

Pedro Ojeda Escudero dijo...

El campo, al arrancar la primavera, revienta de alegría. Hicistéis bien en salir de excursión, sin duda.
Un abrazo.

@ELBLOGDERIPLEY dijo...

Bueno el "Mesón Sabory" en Hiendelaencina, quién va a comer algo malo con ese nombre, la "Chorrera de Despeñalagua", y una misteriosa excursión a unas antiguas minas de plata. Indiana Jones en versión Guada, cómo mola ¿Habrá Repor de las minas y la ciudad fantasma? Seguro que has hecho fotillos...
Besotes.

Anónimo dijo...

Un día de campo así no viene mal para desconectar de una semana movida o no.

Un saludo