Capitán Abu Raed

Apenas sabemos nada de ellos, pese a ser países del próximo Oriente, cerca del Mediterráneo, sólo noticias que llegan por los telediarios y generalmente conflictivas. Su cine como medio de transmitir su manera de ser y de vivir pocas veces encuentra huecos en nuestras saturadas pantallas: Caramel (una peluquería de señoras, de Líbano), La banda nos visita (una orquesta que se traslada a la ciudad equivocada, de Israel) o Paradise Now (dos jovenes amigos que dejan su taller de coches para convertirse en terroristas, de Palestina). Ahora llega la primera película jordana que tiene una exhibición internacional, Capitán Abu Raed, la historia de un hombre de la limpieza que se encuentra una gorra de capitán de avión en el aeropuerto donde trabaja y empieza a contar historias de viajes y de países a los niños del barrio donde vive. Protagonizada por Nadim Sawalha (actor que estudió arte dramático en Londres pero que tiene una relación muy directa con el mundo del teatro de su país) y por Rana Sultan (presentadora de televisión en su debut en el cine, guapísima) está dirigida por Amin Matalqa, que ha hecho muchos cortos en Estados Unidos pero ha querido debutar con una película donde retrata Amman como un personaje más. La violencia doméstica y el absentismo escolar también se tratan en una película amable, cálida, que realza el valor de la amistad y de la tolerancia.